
El ZX Spectrum es un icono de la era informática. Sin embargo las grandes ideas rara vez funcionan gracias al empuje de una sola persona, incluso si hablamos de alguien con el carisma, inteligencia y la capacidad de trabajo de Sir Clive Sinclair. Hemos comentado aquí ya las motivaciones que culminaron con el nacimiento de la serie de ordenadores de Sinclair, tanto desde el punto de vista económico como conceptual. Sinclair pretendía introducir un ordenador en cada casa; según decía, el dinero llegaría inevitablemente pero él pretendía cambiar la sociedad.
La mayor virtud de un líder es saberse rodear de los mejores. Algunos de los más destacados cerebros tras el Spectrum, como Steve Vickers, Richard Altwasser o Rick Dickinson son dignos de recordar. Os presento hoy, si tenéis un ratito para relajaros, a Richard Francis Altwasser.
Your Computer en un artículo de Julio del 82 titulado “El ingeniero detrás del Spectrum” (p. 38) le presentaba como surfista ocasional, a veces ingeniero y entregado entusiasta de los microordenadores a tiempo completo.
https://ia600701.us.archive.org/8/items/your-computer-magazine-1982-07/YourComputer_1982_07.pdf
Richard F. Altwasser nació en 1957. Se graduó con honores en ingeniería en junio de 1978, en el Trinity College de Cambridge. Inicialmente quiso seguir su carrera en el mundo académico en un cargo de profesor universitario, pero ello implicaba trasladarse al lugar donde le ofrecieron el empleo, las Filipinas. Esto sin duda habría contribuido a lanzar su carrera en el mundo del surf, pero con veintiún años los planes cambian fácilmente. Decidió casarse y permanecer en U.K. Llegó a escribir a 19 compañías y le ofrecieron hasta cuatro empleos. Se decidió por Metal Castings en Worcester. Comenzó liderando el pequeño equipo que instaló y mantenía los robots industriales de la empresa.
Un amigo sueco le acercó al mundo de la microcomputación y le recomendó para iniciarse el Tandy TRS-80. Pronto fue seducido por aquel ordenador, e indagó sobre sus posibilidades en el campo de las aplicaciones industriales. Mostró a los directores de Metal Castings los usos potenciales de este novedoso artilugio en el control de la maquinaria y quedaron encantados. Sin embargo Altwasser no estaba contento con su proyección laboral. Su empresa, además, estaba fuertemente relacionada con la automoción ya que proveía a varias compañías del sector. Durante los años 1979 y 1980 la economía británica sufrió una importante recesión. Como consecuencia, Metal Castings se empleó más en recortar gastos que en desarrollar técnicamente la producción. Comenzó a pensar en cambiar de empleo. Un anuncio en la prensa llamó su atención. Sinclair buscaba un ingeniero electrónico.
Meses antes la empresa había lanzado el ZX-80 y los resultados les habían animado a mejorar el diseño. Un objetivo se iba perfilando en la mente de Sir Clive: hacer accesible la informática a todos. Altwasser se sometió a dos entrevistas. La primera evaluó su capacidad técnica, su inteligencia y personalidad (querían saber si era introvertido o extrovertido, entre otras cualidades) y la segunda con el gran jefe, en Cambridge. El mismo ingeniero describe muy gráficamente el encuentro:
“Me invitó al despacho, donde tenía un ZX-80, y me indicó que podía tomar asiento. Después de sentarme, tras unos minutos en silencio, pensé que sería mejor hacer algo. Entonces comencé a escribir un pequeño programa en el ZX-80; así iniciamos una pequeña conversación. Un momento después me ofreció el empleo y yo acepté. Nos dimos la mano y eso fue todo”.
De esta espartana manera -o debería decir sinclairiana-, el primer lunes de septiembre de 1980 Altwasser empezó a trabajar para Sir Clive. Ese mismo día le informaron que cierta máquina con 8Kb de ROM y 16Kb de RAM iba a ser lanzada, y que el jefe de ingenieros estaba de vacaciones, de modo que le tocó escribir algunos programas para mostrar las capacidades de ese artilugio. Trabajó hasta tarde, y aquella fue la tónica durante los siguientes dos años. Suya es la frase:
“los empleados de Sinclair no tienen demasiadas aficiones; tienden a trabajar demasiado”.
El ZX-81 estaba en una fase avanzada de su conceptualización, y Altwasser se encargó de diseñar su placa. Sinclair, según descubrió por aquel entonces, no empleaba técnicos para plasmar las ideas de los ingenieros. Ellos mismos hacían todo el trabajo, desde el diseño a las tediosas tareas de soporte. Dedicó horas a soldar componentes para montar los prototipos del ZX-81. Tras su lanzamiento, ocupó el cargo de responsable de desarrollo de computadores. El nacimiento del Spectrum estaba cerca.
Desde Julio de 1981 sus debates con otros ingenieros se fueron plasmando en bocetos para la siguiente generación Sinclair. Concretamente incrementaron la resolución, y liberaron en la medida de lo posible tareas de la CPU relacionadas, entre otras, con la visualización en pantalla de gráficos que ahora podían incluir color. La falta de memoria le obligó a estrujarse los sesos y de esa forma nació el conocido choque de atributos. Gracias a este y a otros trucos el nuevo Spectrum requería sólo 7Kb para su funcionamiento, dejando 9Kb al usuario para su uso y disfrute. El manejo de datos provenientes del cassette también fue mejorado, posibilitando mayor densidad de información en las cargas. El nuevo ordenador pasó a llamarse Spectrum, y no ZX-82. ¿La razón?. Según él mismo dijo:
“El ZX-81 reemplazó al ZX-80, pero el Spectrum se pensó para funcionar paralelamente al ZX-81, no para reemplazarlo”.
También estuvo involucrado en los estudios preliminares del desarrollo de los ZX microdrives, que podían almacenar más de 100Kb con una tasa de transferencia de 16Kb/seg y con un coste de 'sólo' 50 libras.
Finalmente Altwasser dejó la compañía junto a Steven Vickers –el matemático responsable de la ROM del Spectrum- a principios de mayo del 82 (la fuente de este dato es más fiable que otras que circulan por la red), muy poco después del lanzamiento del Spectrum en Abril del 82. Fundaron una compañía cuyo nombre provisional fue Rainbow Computing Company. El éxito del nuevo producto de Sinclair fue tan grande que, pese a continuar con su nueva empresa, produjo junto a Steven Vickers programas y periféricos para el Speccy.
Es una pena que el infoseek de Word of Spectrum no funcione todo lo bien que quisiéramos aun, pero aquí podéis ver el listado de programas de Altwasser. Todos ellos son protohistoria del Spectrum. También un par de libros con programas para ZX-81 y ZX-82.
http://www.worldofspectrum.org/infoseekpub.cgi?regexp=^Richard+Francis+Altwasser$
Aquí material de WOS de Steven Vickers, la mayoría libros técnicos.
http://www.worldofspectrum.org/infoseekpub.cgi?regexp=^Steven+Vickers$
La empresa en cuestión produjo el Jupiter Ace.
El fracaso del Jupiter Ace, sin embargo ha dejado una comunidad de nostálgicos que aun hoy recuerdan con cariño este pequeño artilugio de aspecto muy parecido al ZX-80 y ZX-81. Aquí una página con gran cantidad de material para que le echéis un vistazo si os apetece:
http://www.jupiter-ace.co.uk/whats_new_0612.html
El tiempo pasa también para los genios.
La carrera de Richard Altwasser volvería a cruzarse con el apellido Sinclair, pero esta vez en 1986 como jefe de ingenieros de Amstrad tras el cambio de manos de la compañía. Estuvo involucrado en el desarrollo de los nuevos modelos más adaptados al uso recreativo hasta 1992, más o menos, cuando la empresa dio por acabada la era Specrum. Posteriormente trabajó como director técnico en Meto AG, vicepresidente ejecutivo en OSS (constructora naval filial de Maersk) y empresas como RM plc, Xitex software, Promethean y Portishead Parish, donde su perfil laboral le sitúa actualmente.
Por lo que se puede ver de él hoy en la red -mucho menos material por cierto que el disponible sobre otros personajes-, es un hombre feliz, alejado de los medios, que tiene su página web llamada “Altwasser Sailing Diary”.
http://www.altwasser.de/
Está claro que mantiene su afición por el mar, y que disfruta de ella con pasión con su familia en su yate “Bingo”, aunque ya no sea el surfista ocasional que dudó si mudarse a Filipinas.
Steve Vickers. La imagen más actual que he podido encontrar de él. Sostiene en sus manos el Jupiter, pero para mí que el que tiene enchufado no es ese… 😉
Una de las imágenes más actuales que he podido encontrar de Altwasser.
Así que pese a la importancia de Sinclair en el mundo de la informática personal, la historia no debe olvidar a otros genios que trabajaron en la sombra o más alejados de la exposición mediática. Sin ellos –lo que más me gustan a mí, por cierto-, no hubiese sido posible el gran éxito empresarial y conceptual del ZX Spectrum. Sinclair, de hecho, tras la marcha marcha de Altwasser de la empresa publicó un anuncio en el que declaró que buscaba al 'mejor ingeniero del mundo', algo que todos -menos el propio Altwasser- interpretaron como el mayor reconocimiento del que era capaz el excéntrico Sir Clive.
Saludos Spectrumeros.
Brillante articulo!!
Muy interesante. Se hace corto.
Excelente como siempre.
Muy MUY interesante lo del Jupiter Ace. Es una máquina que claramente tenía un aire Sinclair, pero son esas similitudes que te hacen pensar que no es plagio, sinó que hay una conexión entre los productos. Ahora queda claro!
Ha muerto el diseñador del Spectrum Rick Dickinson 🙁